La habitación te invita a despertar mirando la naturaleza que le rodea. El dormitorio, 13 metros cuadrados y con cama de 150 cm, cuenta con una ventana con espectaculares vistas al río Guadalaviar, sofá de lectura, TV , baño completo, secador, albornoces, zapatillas, cafetera, climatización y wifi gratis.

Haciendo honor al tono rojo de las pinturas rupestres que se encuentran en la cercana Cueva de Doña Clotilde, destaca en esta habitación. Las texturas y acabados mate-brillo se adaptan a la perfección a la estancia llenando de personalidad el espacio y nos trasladan a la sensación que la estancia se transforme en el interior de una cueva dotada de un confort especial.

Disfruta de un amplio espacio, 16 metros cuadrados, con vistas a la montaña. La habitación con cama de 2 x 2 m cuenta con una ventana orientada hacia el río Guadalaviar, sofá para una agradable lectura, TV, baño completo, secador, albornoces, zapatillas, cafetera y wifi gratis. 

En esta coqueta habitación destaca el recuerdo de una flor de pétalos con profundidad como la manzanilla, combinando diferentes piezas creando un juego visual, atractivo, distinguido y de calidad.

Mezclas de color y textura en los diferentes elementos de la habitación y que encajan a la perfección, dotando a esta habitación de un ambiente único.

Un espacio único, amplio y moderno. La estancia, 14 metros cuadrados, con cama de 150 cm ofrece un gran descanso para sus ocupantes. Es nuestra habitación adaptada. Cuenta con una ventana hacia nuestro patío interior, sofá de lectura, armario, cafetera, TV, baño completo, secador, albornoces, zapatillas y wifi gratis. 

El rojo característico de esta variedad autóctona de pino se traslada en forma de las tonalidades de color rojizas y marrones inspiradores en esta encantadora habitación.

Tonalidades de color en contraste muy neutras, cálidas y acogedoras aportando una sensación de bienestar y tranquilidad.

Para los que buscan siempre lo mejor, esta habitación de 25 metros cuadrados, es ese espacio de lujo que le hará sentir como nunca. Cuenta con dos alturas y un balcón, además, de cama de 2 x 2 m, zona de sofá para lectura y TV, baño completo, secador, albornoces, zapatillas y wifi gratuito. Todo lo necesario para vivir una experiencia única.

Albarracín cuenta con un paisaje único: El agua, el viento y los cambios de temperatura han modelado las rocas hasta crear curiosos huecos, callejones, senderos y abrigos donde perderse y dejarse llevar por la naturaleza. De la misma manera nos tenemos que dejar llevar y disfrutar de la suite del Hotel 1877, una habitación donde conectamos con el lugar y formamos parte de él.

Tonalidades marrones, tierra, arena que las podemos ver reflejadas en esta habitación. Cada detalle pensado para dejarnos llevar por la calidad en el mimo, el lujo del detalle y las piezas exclusivas.

Con mayor amplitud para hacer que su estancia sea aún más confortable. La Suite, 20 metros cuadrados, ofrece una experiencia completa que le permitirá estar de vacaciones sin renunciar a nada: cama de 2 x 2 m, con vistas al río Guadalaviar, 2 sofás de lectura, TV, baño completo, albornoces, zapatillas, cafetera y wifi gratis. Detalles pensados para un plácido descanso.

La mariposa isabelina (Actias isabellae) es una de las joyas que deambulan por los pinares de Albarracín, primavera tras primavera pudiéndose llegar a ver incluso en las calles de Albarracín. De gran belleza, cuenta con una coloración en la que predomina el verde y venas de color marrón rojizo y ocelos de varios colores en sus cuatro alas.

El ambiente isabelino les acogerá nada más introducirse en esta elegante habitación. Las tonalidades de la habitación oscilan desde la gama de los verdes, ocres y beige en contraste al verde isabelino y combinados con diferentes texturas que nos recuerdan a la peculiaridad tan impresionante de la mariposa.

Con todas las comodidades para disfrutar de un descanso ideal tras un día de caminata. El dormitorio, 16 metros cuadrados, con 2 camas de 90 cuenta con vistas a la montaña, sofá de lectura, baño completo, secador, TV, albornoces, zapatillas y wifi gratis. Toda ella prevista con multitud de detalles, perfecta para que sea el lugar ideal para descansar y relajarse.

El río Guadalaviar recorre la Sierra de Albarracín desde los Montes Universales hasta el mar Mediterráneo donde desemboca bajo el nombre de Turia. Esta transformación inspira la transformación y el juego de figuras que nos recibirá nada más atravesar el umbral de esta lujosa habitación. Una textura impresionante que crea un ambiente único. Texturas que reflejan la luz como si fuera agua, tonalidades del río y las arenas que lo rodean. Colores propios de este entorno que se introducen en esta relajante habitación.

Amplitud en una habitación acogedora y espaciosa. La Suite, de 22 metros cuadrados y con 2 camas de 90 cm, cuenta con ventanas a ambos lados, una hacia las callejuelas de Albarracín y otro hacia el río de Guadalaviar, zona de lectura con sofá, chimenea y TV,  climatización y baño completo. Diseñada para lograr una cómoda y relajada estancia en pareja con espacios bien diferenciados.

Un mundo de azuleje les recibirá en esta elegante habitación del Hotel 1877 donde el juego de texturas y la iluminación nos hará sentir cerca del mar con sus olas y la suave arena. Continuando con el juego de color y las texturas, las texturas de los tejidos se han elegido combinando colores que encajan a la perfección, dotando a esta habitación de una elegancia especial.

La habitación, de 16 metros cuadrados y con cama de 2 x 2 m, cuenta con una ventana con vistas al Portal de Molina, sofá de lectura, baño completo, secador, albornoces, zapatillas, climatización y wifi gratuito. Distintos espacios modernos equipados con todos los detalles pensados para disfrutar de una magnífica experiencia.

Tradición y belleza presentados en una de las piezas más singulares del ajuar eclesiástico de la catedral de Albarracín. Esta preciosa pieza se traslada a este espacio tan especial trayendo la inspiración del agua y las escamas del pez que representa esta pieza.

Las tonalidades blancas que percibimos en la habitación nos recuerdan a la base sobre la que está colocada el pez y el material fundamental del pez, el cristal, lo podemos ver en las mesitas.

Habitación única con una elegante decoración de hotel de montaña, recubierta de techos de madera y fantásticas vistas, desde el dormitorio a las calles de Albarracín y desde el salón, la Catedral. La Suite, 23 metros cuadrados y con 2 camas de 90 cm, cuenta con salón de lectura, chimenea y tv, baño completo y wifi gratis. El confort, la elegancia y el buen gusto inundan toda la estancia. 

Albarracín es única, tanto que ha acuñado su propia roca sedimentaria, el Aljez o Yeso de Albarracín. Una piedra apreciada gracias a su estructura cristalina con pocas impurezas y color rojizo. Este característico color nos acompaña por las calles de Albarracín y se adentra en esta acogedora habitación. Toques de esta textura y maravilloso color en las paredes se contrastan con los demás elementos de la habitación consiguiendo destacar este material tan único.

Escuche el silencio, el viento, el bosque, lea, fúndase con el entorno, relájese en la habitación, saboree el estar aquí y ahora, sin prisas, a su ritmo, en su espacio. La estancia, de 18 metros cuadrados y con cama de 2 x 2 m, cuenta con un balcón esquinero que da a la calle Portal de Molina, sofá de lectura, climatización y wifi gratis. Aquí se olvidará del reloj y hasta del día que es.

La forja es la combinación de la artesanía y el arte y se cuela en cada rincón de esta habitación de lujo. La combinación de la propia forja nos acompaña en los diferentes espacios de esta habitación recordándonos este trabajo tan propio de la zona. Como tributo, los diferentes toques del mármol negro con vetas sinuosas en color blanco.

En definitiva, un sumatorio de detalles combinados con un abanico de tonalidades que oscilan del blanco al negro pasando por la escala de grises obteniendo como resultado un ambiente contrastado y elegante.